Autonomía digital y tecnológica

Código e ideas para una internet distribuida

Linkoteca. Patterns for Decentralised Organising


…la noción de grupo sin estructura se convierte en una cortina de humo que favorece a los fuertes ó a aquellas personas que pueden establecer su hegemonía incuestionable sobre los demás. Esta forma de hegemonia puede establecerse muy fácilmente porque la noción de falta de estructura no impide la creación de estructuras informales; solo lo impide de las formales.

…la falta de estructura feminista, es normalmente defendida por aquellas que tienen mayor poder (sean o no conscientes de ello). En la medida en que la estructura del grupo es informal, las normas de cómo se toman decisiones son sólo conocidas por unas pocas, y la conciencia de que existe una relación de poder se limita a aquellas que conocen las normas.

Las normas de cómo se toman las decisiones deben ser abiertas y conocidas por todas, lo que sólo ocurrirá si son formalizadas; esto no quiere decir que la formalización de la estructura de un grupo destruya necesariamente su estructura informal, normalmente no ocurre así, pero sí impide que la estructura informal tenga un control predominante, al tiempo que ofrece mejores medios para atacarlas si la gente involucrada no responde a las necesidades
generales del grupo.

Las élites son nada más y nada menos que grupos de amigas que, incidentalmente, participan en la misma actividad política…

Estos grupos de amigas funcionan con redes de comunicación al margen de cualquier canal que el grupo haya establecido con este fin y, si no existen canales, funcionan como la única red de comunicación; porque esta gente es amiga, porque habitualmente comparten los mismos valores y concepciones políticas, porque se hablan en circunstancias de la vida cotidiana, porque se consultan cuando tienen que tomar pequeñas decisiones sobre sus vidas, la gente que participa en estas redes tiene más poder que aquella que no participa.

…si se trabaja ocho horas o se tiene alguna obligación similar es normalmente imposible llegar a ser parte de la élite, simplemente porque no hay suficientes horas para asistir a todas las reuniones y cultivar las relaciones personales necesarias para tener voz en la toma de decisiones; ésta es la razón por la que las estructuras formales para la toma de decisiones son un regalo para las personas cargadas de trabajo. Contar con un procedimiento fijo para tomar decisiones garantiza, hasta cierto punto, la participación de todos y cada uno de los miembros.

This is a book about working in groups, based on 7 years experience in community projects and startups.

I’m not so interested in what you’re working on together, I’m just going to focus on how you do it. To my way of thinking, it doesn’t matter if you’re trying to build a better electric vehicle, or develop government policy, or blockade a pipeline; whenever you work with a group of people on a shared objective, there’s some stuff you’re going to deal with, some challenges. How do we decide what we’re working on? who does what? who can join our team? what are our expectations for each other? what happens when someone doesn’t fulfil those expectations? what do we do with disagreement? how do decisions get made?

I’m convinced there is not a “one size fits all” recipe, a management structure that you can take off the shelf and install in your collective or your company. But my hypothesis is that there are patterns: common design elements you can draw on as you construct a recipe that’s right for you. Each pattern in this book names a challenge that you are likely to face, and offers tools and techniques you can try in response to that challenge.

This is a book for community organisers, leaders, managers, consultants, coaches, facilitators, founders… if you work with groups of humans, these patterns apply to you.

The essay reflected on the experiments of the feminist movement in resisting the idea of leaders and even discarding any structure or division of labor. However, as Hilary Wainwright wrote in Z Magazine, Freeman described how «this apparent lack of structure too often disguised an informal, unacknowledged and unaccountable leadership that was all the more pernicious because its very existence was denied.» As a solution, Freeman suggests formalizing the existing hierarchies in the group and subjecting them to democratic control.