Para desinstalar un paquete del sistema en Debian usando apt se puede usar apt remove. Sin embargo, este comando no elimina los archivos de configuración que se crearon cuando se instaló el paquete. Para eliminar los archivos de configuración, lo que apt llama configuración residual, se puede usar dpkg --purge.
El gestor de paquetes apt guarda una lista de paquetes para no tener que descargarla cada vez. Cuando una instalación Linux llega a una cierta edad el caché de apt puede ocupar varias decenas de gigabytes. apt no limpia el caché automáticamente, así que puede contener en el listaod paquetes obsoletos que ya no se pueden instalar. Se puede comprobar el tamaño del caché de apt con el siguiente comando:
Debian es una distribución conocida por su estabilidad. Pero la estabilidad tiene un precio: no estar al día, utilizar programas que no tienen las últimas funcionalidades porque no están en su última versión; incluso no poder usar un programa en absoluto porque necesita versiones de otros programas para ser instalado (dependencias en el argot Linux) que no están disponibles.
Todo esto es así en la versión stable de Debian. En cambio en las ramas testing, unstable o mucho más en la experimental, se pueden encontrar versiones más recientes de todos los programas, incluso las últimas versiones.