Autonomie numérique et technologique

Code et idées pour un internet distribué

Linkothèque. Carnet de bord. Page 25


Do you hate your Internet Service Provider? Do you hate your Email Provider?

We’ll help you send them a GDPR Data Access Request designed to waste as much of their time as possible. They are legally required to respond to your request within 30 days!

…la expansión del tiempo productivo, que invade y permea el reproductivo…

…no quieran parar al haber unido el tiempo vital, reproductivo, al productivo hasta extremos en que el primero desaparece, entendido como una negación del segundo, el único válido.

…sólo aquello que pueda producir un beneficio rápido, inmediato, es válido y se desecha un tiempo lento, pausado, en el que se permita el error, la investigación profunda y libre.

…una vida acelerada, procesos acelerados en los que el objeto ya no es la expansión del conocimiento sino la producción constante de resultados inmediatos.

Before implementing a captcha, it’s worth considering if one is necessary to begin with. To help with evaluating this proposition, consider if your threat model is concerned over customized or uncustomized spam. Uncustomized spam is pervasive across many Internet protocols, and you will encounter it quickly after enabling HTTP, SSH, or many other protocols on a server. It is generally unintelligent, cheap to execute, and easy to block, even without captchas. Customized spam, however, is spam that has been written to specifically affect a given company, service, website, or user. As customized spam is created by an actor that is able to tailor it to your service, it is more dangerous than uncustomized spam, and more effort is required to effectively limit it.

Just because someone could spend hours (or minutes) writing a program to spam your website does not mean that someone will. Your personal blog about the latest vegan bacon is not a high-priority target for anyone. Adding a ReCAPTCHA to your Contact Me page is just a great way to get no one to talk to you. I’ve ran several websites with millions of pageviews that have received zero customized abuse and have spoken to other webmasters with similar experiences. Jeff Atwood of codinghorror.com once wrote similarly:

The comment form of my blog is protected by what I refer to as “naive captcha”, where the captcha term is the same every single time. This has to be the most ineffective captcha of all time, and yet it stops 99.9% of comment spam.

This is not a suggestion to do nothing, ignore basic security, and be unprepared for attacks, but rather to realistically consider your threat model and apply only what is necessary.

It’s been a few years since this kind of argument has come up, but it’s one that we’ve had to swat down a few times in the past: it’s the argument that somehow if a company offers a service for free, it means that they’ll absolutely snarf up all your data, and that requiring services be paid for directly by users somehow would fix that.

Of course, it seems rather easy to point out why that’s wrong with two examples. First we pay for other services such as our broadband and mobile data providers and they are so much worse on the privacy front, it’s not even remotely comparable. It’s not as if magically paying for the service has stopped AT&T or Verizon from being horrific on the privacy front. The snarfing up of data doesn’t go away if you pay for services.

Second, there are businesses that have been built on giving away free tools without having to snarf up your data. Indeed, that’s actually how Google succeeded for much of its early history. It didn’t need to know everything about you. It just needed to know what you were searching for. And that was massively successful. It’s true that, over time, Google has moved away from that, but others (like DuckDuckGo) have stepped into that space as well.

Las “Lanzaderas de Empleo” se desprenden de los comportamientos pasivos asociados de forma tradicional a la persona desempleada. Llaman al cambio y a la acción, al trabajo en equipo comprometido y proactivo para que las personas desempleadas recobren la ilusión y descubran todas las competencias y habilidades que disponen para encontrar trabajo y/o desarrollar su proyecto empresarial.

Construyendo equipo en un clima de confianza y ayuda mutua, mantienen sesiones de coaching, trabajan la inteligencia emocional, la comunicación y la creatividad; conocen nuevas técnicas de elaboración y presentación de currículos, analizan cómo afrontar las entrevistas de trabajo a través de diversas dinámicas, desarrollan mapas de empleabilidad y aprenden a trabajar la marca personal, a diferenciarse y posicionarse mejor en el mercado laboral. El objetivo último es el de mejorar su empleabilidad desde una óptica que los sitúa en una posición activa, comprometida y solidaria ante los grandes retos que impone la situación actual.

Hace unos días hemos certificado la construcción de unos juegos en un cole. Es la primera vez que esto ocurre y estamos muy contentos.

Certificar nos permite, por un lado, legitimar otro tipo de trabajo (entre lo formal y lo informal), frente a grandes empresas del sector que tienen actualmente el negocio de la homologación.

…situaciones de intercambio, transferencia, co-creación, combinando el análisis y la observación, con los diálogos abiertos y la activación de dispositivos que permitan el prototipado, la experimentación, la participación de expertos cruzados con otros conocimientos situados…

Autor: Ricardo Amasté

Poner en valor el análisis, los datos, las mediciones. Pero no caer en el error de que eso suplante las conversaciones, los encuentros. Sólo de esa forma los fríos datos podrán mantener viva la llama de la confianza. Conseguir que las cuentas ayuden a contar historias, a hacer comunidad.

Saber que si medimos (si es que hay que medir) es para maximizar la capacidad de sentir. Para hacer efectivo el derecho a la cultura (de manera equilibrada con su función como recurso). Para que ese derecho sea no solo a acceder a lo creado, sino a crear.

Y es que no podemos pasar de puntillas sobre la tendencia de medir y cuantificar (también) en lo cultural en este tiempo neoliberal. Una práctica de la que ya no parece haber escapatoria, que tras engañosos parabienes, nos somete a su lógica y nos convierte principalmente en factor de una abstracta (o quizá no tanto) cuenta de resultados.

…medir, contar, casi siempre beneficia a quien tiene el poder y quiere mantener su dominio.

…si la práctica artística es ante todo un ejercicio exploratorio e impredecible, en vez de medir, lo que se debería incentivar es el merodear, juguetear, vislumbrar.

…si vamos a medir (si nos van a medir), definamos y compartamos primero las preguntas, los retos, el marco y unos indicadores y metodologías de medición a su medida.

En 2015 decenas de plataformas municipalistas se presentaban a las elecciones municipales y obtenían resultados realmente inesperados: ganaban los ayuntamientos las de grandes ciudades como Barcelona, Madrid o Zaragoza y también de muchas otras, además de conseguir concejales en la oposición en otros tantos casos. El municipalismo se situaba así en el centro de la política del Estado español mediante lo que se considera hoy el asalto institucional de las herederas del 15M.

Este libro analiza el ciclo municipalista 2015-2019 y lo hace a través de un horizonte común, la ciudad democrática, hacia el cual camina un proyecto que aprende haciendo. Las autoras sitúan y analizan la irrupción del municipalismo, analizan críticamente diferentes políticas públicas transformadoras e innovadoras implementadas por y en las “ciudades del cambio” en ámbitos como la tecnopolítica o los bienes comunes y también cuentan cómo las nuevas organizaciones y redes municipalistas han intentado, con mayor o menor éxito, cambiar las formas de hacer política para volverlas más feministas, horizontales y democráticas.

Salus.coop aims to legitimize citizens’ rights to control their own health records while facilitating data sharing to accelerate research innovation in healthcare.

Why is this important

The future of our health significantly relies upon the potential of combining, integrating and sharing health data from different sources. However, the decision to share one’s data requires sizing many risks, which include privacy, security, and even the potential misuse of data. Who do we trust to make these judgements? Although European citizens legally own their health data, in practice they often cannot access their data or control its use. This is hindering innovation in healthcare and slowing down research.

Decisiones indudablemente importantes que definen a una compañía y su papel en la sociedad, rechazadas por unos accionistas que únicamente enfocan sus votos a la obtención de más ingresos, sin importarles cómo se consigan. Tengo acciones de esta compañía, y estoy dispuesto a hacer lo que sea y aceptar cualquier cosa, aunque ello suponga el fin de la civilización humana, con tal de maximizar mis beneficios. El caso perfecto que ilustra que el sistema capitalista tal y como lo conocemos ha llegado al límite de lo insostenible, la definición canónica de la tragedia de los comunes: un conjunto de individuos, motivados solo por el interés personal y actuando independiente pero racionalmente, que terminan por destruir un recurso compartido limitado (el común), aunque a ninguno de ellos, ya sea como individuos o en conjunto, les convenga que tal destrucción suceda.

Cuebiq is invested in the movement to drive innovation and enhance the quality of life across the globe. Because of that, we are providing access to our location data to the scientific community in order to share our insights and create positive action in the service of humanity. Through our Data for Good Program, we provide access to anonymous, privacy-compliant location-based data for academic research and humanitarian initiatives related to human mobility.

The filter bubble is particularly pernicious when searching for political topics. That’s because undecided and inquisitive voters turn to search engines to conduct basic research on candidates and issues in the critical time when they are forming their opinions on them. If they’re getting information that is swayed to one side because of their personal filter bubbles, then this can have a significant effect on political outcomes in aggregate.

 

Modes of access and tools to manipulate data have brought marginalized actors to collaboratively create alternative narratives to those delivered by dominant power structures. Non-profit organizations and activist groups increasingly base their campaigns on data, using visualization as an agency tool for change. Data-driven alternative narratives counteract the hegemony of information, questioning the status quo and promoting the non-flattening of the data society, seeking to strengthen democracy. Data visualization is a decisive adversarial tool (DiSalvo, 2012) for turning data into alternative narratives. Translating data into visual representations for alternative narratives is an activist practice that requires a critical approach to data to make a political position evident and coherent.

¿Se imaginan un gobierno que registre cómo hemos cruzado la calle o si hemos pagado con retraso una factura, para restarnos puntos del carné ciudadano gracias al cual accedemos a servicios básicos? ¿O trabajar en una empresa que pueda despedirnos de modo fulminante, porque un algoritmo ha detectado que vamos demasiado al baño y eso resta productividad? ¿Qué? ¿Otra periodista recurriendo al tópico de 1984, Un mundo feliz o Black Mirror? No. Lo primero ya sucede en China y lo segundo, en los almacenes de Amazon.

Como desgrana la matemática Cathy O’Neil en Armas de destrucción matemática (recién publicado por Capitán Swing), muchos bancos, aseguradoras y auditoras «usan algoritmos canallas» para engullir billetes y éxito empresarial, sin reparar en los daños colaterales humanos. «El problema es que los beneficios acaban actuando como un valor sustitutivo de la verdad y afectan a las personas en momentos cruciales de la vida», escribe O’Neil.

Porque, ¿de quién es la responsabilidad en caso de que el algoritmo del vehículo autómata tenga que elegir a quién salvar (y a quién no) en un accidente fortuito?

llama Marina Garcés a la emancipación frente a la servidumbre y la delegación tecnológicas. «Lo que podemos hacer, siempre, es autoorganizarnos. No sólo en el ámbito digital, sino en todos. Una sociedad incapaz de tomar decisiones en colectivo está expuesta a cualquier forma de dominación, aunque cada individuo viva en la ficción de creerse libre».

« Siempre fui de la oposición. En mi época de estudiante se llevaba la asepsia de Mies van der Rohe (de edificios mínimos, sencillos) y a mí me llamaban barroco », contaba Higueras. « En contra de lo que decía Mies – ‘menos es más’ – a mí siempre me parecía que menos era menos y más, más ».

A partir de 1980, Higueras tuvo un parón constructivo, sin apenas encargos y corrió el rumor de que había abandonado la profesión para dedicarse a la pornografía en su cueva particular. Como él mismo reconocería en una entrevista en El Mundo, « en este sótano grabé 2.717 películas. ¡Joder! Mira que me lo he pasado bien en la vida. Traía gente, follábamos y hablábamos ante la cámara. Tenía un zoom buenísimo ». En esa misma entrevista afirmó que entre los 50 y los 65 años tomó cocaína a diario. « La pena es que me dejó de hacer efecto. Yo nunca la dejé a ella ».

Purism is a Social Purpose Corporation (SPC), which means we put social good above exploiting people. Librem One is a bundle of services—chat, vpn, email, social, and more—from Purism, SPC.
We believe that privacy and technology can be moral and convenient. Librem One allows you to reclaim your privacy, securely communicate to your friends, and does so easily with your freedoms intact. We bundle all the tools together for you to replace the privacy invading, locked-in, exploitative big-tech services. Putting you in charge of your digital life.
We provide products and services based on values that society wants, that respect digital civil rights. Welcome to Librem One, socially responsible services from Purism.

¿cómo unas prácticas tan fundamentales para la reproducción humana como gestar, parir y dar de mamar son tan menospreciadas? A partir de esta mirada tenemos que repensar todo ello.

La maternidad es un hecho que nos incumbe a todos, no es una responsabilidad individual. Es una responsabilidad colectiva.

No se puede abordar la maternidad comprando ese discurso que dice que la maternidad es un lastre, como si la maternidad fuera el problema, cuando el problema es el mercado y este sistema.

La rebelión de las feministas de los años 60 y 70 fue necesaria porque la maternidad, a lo largo de los siglos, ha sido utilizada como instrumento de control del cuerpo de las mujeres, pero en este rebelarse también se cayó en un cierto discurso antimaternal, antirreproductivo.

A las mujeres además nos han vendido una maternidad de color de rosa, un postparto de película en el que a los dos días la madre está perfecta a nivel físico y emocional, y es una gran mentira. La maternidad implica muchas contradicciones, cambios en la relación de pareja, en cómo conciliar o cómo encajar esa maternidad con el ámbito personal y profesional. La maternidad es todo menos fácil y de ahí que sea vivida con tanta culpa por las mujeres.

la derecha es quien más ha hecho bandera de la maternidad y la familia. Sin embargo, lo hace desde un punto de vista reaccionario, apelando a una maternidad que es utilizada como instrumento de control del cuerpo de las mujeres. Y además, lo hace de una manera totalmente hipócrita, porque nos dice, a las mujeres, que tengamos criaturas pero promueve unas políticas socioeconómicas contrarias a la crianza, una políticas que nos dificultan poder tener hijos, ya que precariza el mercado laboral, recorta en servicios públicos, permite la especulación inmobiliaria. La izquierda debería desenmascarar esa supuesta promaternidad de la derecha con un discurso propio, feminista y emancipador.

En todos los países, sin excepción, los chicos son mucho más propensos al bullshit que las chicas, algo que no creo que tome a nadie de improviso. La diferencia de género varía muchísimo de un país a otro, sin embargo; en Inglaterra las mujeres son mucho más honestas que los hombres, mientras que en Estados Unidos los varones sólo son ligeramente más fantasiosos.

Si miramos por clase social, las diferencias son todavía más pronunciadas. Los estudiantes de clase alta (en el cuartil superior de renta) son sistemáticamente más deshonestos que los el resto. Los del cuartil inferior son sistemáticamente más sinceros.

Estas ventajas, además, no pueden solucionarse con más educación; mentir como un bellaco es cosa de clase y genero.

Insisto mucho en que los datos sean recogidos realmente en un Trabajo de Campo en vez de sacar conclusiones basadas en los prejuicios que ya tenían antes de realizar la investigación.

En mi post “Cuando importa más el proceso” doy varios argumentos para justificar por qué prefiero el trabajo amateur de las personas implicadas en el reto, en vez de apelar a diseñadores profesionales: “Si bien el resultado final puede que se resienta un poco, el aprendizaje vital adquirido en el proceso compensa con creces, y contribuye a una percepción global de la experiencia muy superior a si el trabajo se asume por profesionales de fuera de la organización”.

Obligo a que todos los miembros del equipo tengan que hacer una «presentación individual» de los datos que han recopilado para que entiendan que nadie va a pasar inadvertido si no ha dedicado tiempo a investigar y hacer el trabajo de campo. Es una forma de asegurar equidad participativa pero también, implicación individual.

Voy a terminar con una idea que me parece sumamente importante: el Taller de Síntesis se hace para diagnosticar un reto y no para buscar soluciones. Es muy saludable, como metodología de resolución de problemas, separar el momento del diagnóstico del de la búsqueda de soluciones.Voy a terminar con una idea que me parece sumamente importante: el Taller de Síntesis se hace para diagnosticar un reto y no para buscar soluciones. Es muy saludable, como metodología de resolución de problemas, separar el momento del diagnóstico del de la búsqueda de soluciones.

Kimai is a free & open source timetracker. It tracks work time and prints out a summary of your activities on demand. Yearly, monthly, daily, by customer, by project … It’s simplicity is its strength. Due to Kimai’s browser based interface it runs cross-platform, even on your mobile device.

Kimai v2 is a web-based multiuser time-tracking application. Free for everyone: freelancers, agencies and companies track their employee working-times and generate invoices.

Kimai is a simplistic time-tracker that keeps record of your time and prints out your results when you need them. The tool works great for those who need a simple solution without any extra features: in it, you can record time in multi-user mode, manage customer and project data, run reports, and export timesheet data.

No database setup is required for installing the app – it has database support out-of-the-box. The new version of Kimai is based on the newest technologies and has a JSON API for setting up integration with other applications.

I was in a similar situation back in 2012. I really wanted to understand how my employees were spending their time. Were they focusing on tasks of the highest priority? How much time did it take them to find solutions? How close were we to achieving our goals? Were the projects I assigned progressing at the right pace? Could I optimize and streamline some of my teams? Do my team goals align with my final goal? It was an endless line of questions all begging just for one solution: A productivity management application.

La existencia del coche eléctrico no es novedosa. A principios del siglo XX y antes de que el fordismo hubiese mecanizado sus cadenas de producción y popularizado el coche privado de combustión interna, ya existían vehículos eléctricos que funcionaban relativamente bien, con baterías de ferro-niquel o de ácido plomo con autonomías ya cercanas a los 100 km.

Sin embargo, el coche de combustión interna terminó ganando un indiscutible terreno, por capacidad, autonomía, versatilidad y mucha mayor ubicuidad de suministro (la lata de gasolina y el surtidor), cuando la red eléctrica era paupérrima, tenía muy poco alcance y nula capacidad para recargar baterías en cualquier lugar.

Sample-Videos.com is a 100% FREE service that allows programmers, testers, designers, developers to download sample videos for demo/test use. No matter what video format they use (MP4, FLV, MKV, 3GP); they will be able to test videos on any Smartphone without any hustle. This is a one stop destination for all sample video testing needs. Just search below for the relevant video formats in specific sizes, download them, and start testing.

A mobile screen resolution can be a big challenge when it comes to watching videos online or offline. By testing out videos one can be rest assured regarding the video playback in an app, without annoying the end users. Choose from four different video extensions i.e. 3GP, MKV, FLV, and MP4. The best thing is all of these are free and very easy to download. We provide you with a specific and perfect resolution in all sizes possible with just one simple click. Check out the one which suits your requirements. All you need to do is hit the DOWNLOAD button, and get started.

Los ThinkPad X60 y X61 son máquinas casi legendarias, reverenciadas y amadas por usuarios que las utilizaron (o las siguen usando) con pasión. Aquellos diseños acabaron abandonándose por parte del fabricante, que aun sin descuidar la familia ha preferido aprovechar otras decisiones de diseño y componentes.

Es aquí donde entran los responsables de 51nb, un grupo de usuarios en China apasionados por esos viejos ThinkPad y obsesionados por ponerlos al día. Tanto que han conseguido convertir su afición en negocio, y ahora transforman estos viejos portátiles y los rejuvenecen con mejores pantallas, procesadores, más memoria RAM que nunca y conectividad Gigabit Ethernet. Viejos por fuera, nuevecitos por dentro.

Ghostscript is a great tool for compressing PDFs. In our tests it delivered the best compression ratio. Simply run:

gs -sDEVICE=pdfwrite -dCompatibilityLevel=1.4 -dPDFSETTINGS=/screen -dNOPAUSE -dQUIET -dBATCH -sOutputFile=out.pdf in.pdf

-dPDFSETTINGS can be any of:
/screen : low-resolution output, lowest output size
/ebook : medium-resolution output, medium output size
/printer OR /prepress : high-resolution with maximum output size

Run the Shrinkpdf script:

./shrinkpdf in.pdf out.pdf

The script is almost same as the explicit gs command above. However, it has one advantage – it does an output file size check.

most journalists seem to have agreed that there is a mad conspiracy between Trump and Putin, with Assange as intermediary and helper. At the end of November, the Guardian claimed that Paul Manafort, head of Donald Trump’s presidential campaign, had met Assange three times in London: in 2013, 2015 and 2016. Fidel Narváez, the then Ecuadorian consul in London, has formally denied this. WikiLeaks initiated legal proceedings against the Guardian and Manafort publicly and denied the meetings. His name does not appear in the Ecuadorian Embassy’s guest book and there are no images of him entering or leaving one of the world’s best-monitored buildings.

The New York Times recently reported that there had been several talks in 2017 between Ecuadorian President Lenín Moreno and the now notorious Paul Manafort. Manafort had travelled to Quito to boost China’s investment in Ecuador. Allegedly, at the meeting with Moreno, there was also talk about Assange, about a deal to extradite Assange to the US in exchange for Ecuador’s debt relief. Assange jokes; wouldn’t it be ironic that the IMF, the International Monetary Fund, of all people, is now deciding on his future fate. He laughs, tormented, in the end the big money always wins. We notice that his persecution by the USA is no longer a secret, everything is open and nothing happens; It is exasperating.

You can use the :resize command or its shortcut :res to change the height of the window. To change the height to 60 rows, use:

:resize 60

You can also change the height in increments. To change the height by increments of 5, use:

:res +5
:res -5

You can use :vertical resize to change the width of the current window. To change the width to 80 columns, use:

:vertical resize 80

You can also change the width in increments. To change the width by increments of 5, use:

:vertical resize +5
:vertical resize -5

Syntastic is a syntax checking plugin for Vim created by Martin Grenfell. It runs files through external syntax checkers and displays any resulting errors to the user. This can be done on demand, or automatically as files are saved. If syntax errors are detected, the user is notified and is happy because they didn’t have to compile their code or execute their script to find them.

«La economía colaborativa (sharing economy) es un conjunto heterogéneo y rápidamente cambiante de modos de producción y consumo por el que los agentes comparten de forma innovadora activos, bienes o servicios infrautili-zados, a cambio o no de un valor monetario, valiéndose para ello de plataformas sociales digitales y, en particular, de internet»

Estas definiciones generales acogen una amplia gama de prácticas, por lo que coexisten con otras propuestas terminológicas que tratan de representar aspectos más específicos de algunos de estos modelos de negocio. Por ejemplo, peer economy o P2P economy enfatiza que las transacciones se producen entre particulares; «economía de acceso» se refiere a los modelos económicos basa-dos en el alquiler y el uso compartido; y «economía a demanda» (gig economy) define a las plataformas que canalizan el encargo de microtareas.

En esta misma línea, el informe de NESTA, Making sense of the Collabora-tive Economy (Stokes et al. 2014) colabora en la construcción teórica del concepto, profundizando en el estudio de los diferentes modelos y sistemas que consideran parte del mismo. El informe alude a la economía colaborativa como «una nueva forma de pensar acerca de los negocios, el intercambio, el valor y la comunidad» (2014: 7), de modo que reconocen implícitamente su carácter de «constructo teórico». Quizás por ello su definición del paradigma se estructura en base a una serie de condiciones: 1) implica el uso de internet, 2) conecta redes distribuidas de personas o recursos, 3) aprovecha recursos infrautilizados, 4) promueve interacciones significativas basadas en la confianza, 5) promueve la apertura, la inclusión y los comunes.

The book is broken up into chapters and sub-chapters. The chapters are:

This is a book about working in groups, based on 7 years experience in community projects and startups.

I’m not so interested in what you’re working on together, I’m just going to focus on how you do it. To my way of thinking, it doesn’t matter if you’re trying to build a better electric vehicle, or develop government policy, or blockade a pipeline; whenever you work with a group of people on a shared objective, there’s some stuff you’re going to deal with, some challenges. How do we decide what we’re working on? who does what? who can join our team? what are our expectations for each other? what happens when someone doesn’t fulfil those expectations? what do we do with disagreement? how do decisions get made?

I’m convinced there is not a “one size fits all” recipe, a management structure that you can take off the shelf and install in your collective or your company. But my hypothesis is that there are patterns: common design elements you can draw on as you construct a recipe that’s right for you. Each pattern in this book names a challenge that you are likely to face, and offers tools and techniques you can try in response to that challenge.

This is a book for community organisers, leaders, managers, consultants, coaches, facilitators, founders… if you work with groups of humans, these patterns apply to you.

I believe that this fascination with “hierarchy” and “non-hierarchy” is a major problem. Focussing on “hierarchy” doesn’t just miss the point, it creates cover for extremely toxic behaviour.

I’m guilty of this myself: having declared ourselves to be a “non-hierarchical” organisation, I’m unable to clearly see the un-just, un-accountable, un-inclusive, un-transparent, un-healthy dynamics that inevitably emerge in any human group. Calling ourselves “non-hierarchical” is like a free pass that gets in the way of our self-awareness.

Jo Freeman named this beautifully in The Tyranny of Structurelessness, where she argues that the informal hierarchies of a “structureless” group will always be less accountable and fair than a more formal organisation.

Freeman uses the word “structureless”, which is specific to the context of her 1960’s feminism. Today, you could swap “structureless” for “non-hierarchical” and get a very accurate diagnosis of a sickness that afflicts nearly every group that rejects hierarchical structures.

We’re coming up to the 50th anniversary of this essay, and still it seems the majority of radical organisations have missed the point.

So I repeat: I don’t care about hierarchy. It’s just a shape. I care about power dynamics.

I think words like “non-hierarchical”, “self-managing” and “horizontal” are kind of vague codes, pointing to our intention to create healthy power relations. In the past, when I said “Enspiral is a non-hierarchical organisation”, what I really meant was “Enspiral is a non-coercive organisation”. That’s the important piece, we’re trying to work without coercion.

Playing for Team Human today, master of human connection and consensus, Loomio co-founder Richard Bartlett. Bartett coming all the way from New Zealand, stopped by Douglas’s home studio while on a community organizing workshop tour of the US.

On today’s show, Bartlett and Rushkoff discuss the challenges of building consensus in an all too often top-down, winner-takes all society. Together we’ll learn how Loomio, inspired by the general assemblies of Occupy Wall Street, strives to amplify collaborative power and foster more participatory democratic practice. It’s a project that starts with small-scale, human-to-human connection and grows outward from there.

Solarized is a sixteen color palette (eight monotones, eight accent colors) designed for use with terminal and gui applications. It has several unique properties. I designed this colorscheme with both precise CIELAB lightness relationships and a refined set of hues based on fixed color wheel relationships. It has been tested extensively in real world use on color calibrated displays (as well as uncalibrated/intentionally miscalibrated displays) and in a variety of lighting conditions.