«Nuestros bienes comunes no son productos que nos ofrece el Estado, son nuestras conquistas»
Las ‘Humanidades ZERO’ son aquellas que, debido a la banalización del ocio cultural, endulzan un poco la vida pero ni alimentan ni transforman nada.
El tiempo de trabajo se funde con el tiempo de consumo y de ocio, en mundos que producen valor capitalista constantemente, como las redes sociales.
Eso es lo realmente relevante, el poder convertir nuestras herramientas culturales en herramientas de vida y de transformación.
Estamos en un proyecto de vida para generar el siguiente y el siguiente y el siguiente. Vivimos como en una especie de fuga sin fin que muchas veces lo que hace es que perdamos el sentido de lo que estamos haciendo.
una especie de autorreferencialidad muy engañosa que en el mundo de la política ya está teniendo resultados: uno tiende a pensar que el resto piensan como él y el disenso se convierte en un escándalo o en una agresión personal. Una fuente de enemistad radical. Mientras que en el mundo de los activismos o de la creación artística facilita la creación de burbujas que se miran a sí mismas y se autocomplacen.
No sabemos cómo convertir nuestros saberes en procesos de emancipación y de transformación colectiva.