Autonomía digital y tecnológica

Código e ideas para una internet distribuida

Linkoteca. Josep Martínez Polo


El principio básico de la economía colaborativa es que el recurso que se consuma sea un bien temporalmente en desuso. Lo que se observa (Gil, 2018) en la mayoría de las plataformas es que los recursos que se introducen en el mercado no cumplen la función de ser bienes ociosos tratándose más de bienes de inversión que se han adquirido con el fin de que el bien produzca valor.

el tipo de actividades a las que se hace referencia con el concepto de economía colaborativa poco tienen que ver con relaciones de colaboración.

Uno de los filósofos contrarios a este tipo de prácticas es Byung-Chul Han (2014) que afirma que la economía del compartir conduce en última instancia a la comercialización total de la vida. Y subraya la importancia del dinero: “quien no posee dinero, tampoco tiene acceso al sharing”. Para este pensador surcoreano, “también en la economía basada en la colaboración predomina la lógica del capitalismo. De forma paradójica, en este bello compartir nadie da nada voluntariamente”.

¿Cuántos de ustedes poseen una taladradora? Rachel Botsman, la autora del libro The Rise of Collaborative Consumption, preguntó a la audiencia en TedxSydney en 2010. Previsiblemente casi todos levantaron la mano. “Ese taladro eléctrico se usará entre 12 y 15 minutos en toda su vida”, continuó Botsman con burlona exasperación. “Es un poco ridículo, ¿no?” Porque lo que necesitas es el agujero, no la taladradora.