Autonomía digital y tecnológica

Código e ideas para una internet distribuida

Linkoteca. teoría de la conspiración


The German psychologist Klaus Conrad called this premonitory state apophenia, defined as perceiving patterns that don’t actually exist and referring them back to an unseen authority who must be pulling the strings. It’s a theory he developed as an army medical officer specializing in head traumas under the Third Reich. Today, it’s analogized to political conspiracy thinking.

Conrad became famous for recognizing this oppressive emergence of patterns as a pre-psychotic state that he compared to stage-fright. It culminates in a false epiphany: an apophany is not a flash of insight into the true nature of reality but an aha experience (literally: Aha-Erlebnis) that constitutes the birth of delusion.

In an apophenic state, everything’s a pattern. And while Conrad’s stage-model uses the analogy of starring in your own one-man show, the narcissism of living online today provides plenty more. On Instagram you can filter your face, filter out unwanted followers, construct an image that you and your peers want to believe in—you’re living a private illusion, in public, that the world reifies with likes. For-profit data collection has literally “reorganized” the world to revolve around you. As you wish it—or they will it.

The true epiphany, I want to argue, is that you’re the one pulling the strings. Enlightenment is to realize you have more agency than your push-notifications would have you believe.

Además de las noticias que relacionan el 5G con el covid-19 y otras ideas conspiranoicas, aún no está claro que este tipo de tecnología tenga afectaciones a la salud, ya que hay controversia en los estudios y no se ponen de acuerdo. Lo que sí es seguro es que el 5G significa más fabricación de dispositivos, antenas, cables, servidores y aparatos de todo tipo, que se construyen con minerales, que se extraen de minas, que afectan gravemente a la tierra y el territorio. También llevará aparejada mucha obsolescencia y renovación de equipos, y por tanto, mayores cantidades de residuos tecnológicos, que irán a parar a vertederos, ríos, costas, que también afectarán gravemente a la tierra y el territorio. Es decir, a muchas personas.

Y estar a la última en tecnología para acceder a estas redes ¿significará trabajar más para consumir más tecnología? ¿En qué condiciones laborales? Pues con el 5G también se prevé más automatización en puestos de la industria y los servicios. Suena a más precariedad, deslocalización, desempleo. ¿O vendría acompañado de dignificación de otros puestos de trabajo y rentas básicas?

Pero también con consecuencias geopolíticas, como hemos estado viendo con la pugna entre Estados Unidos y China. ¿Dentro de unos años habrá varios Internet, según los bloques geopolíticos? Todo apunta a ello.

«Freemen» creen que el derecho escrito es un contrato, y que las personas son libres de someterse a ella, o escoger vivir bajo lo que ellos llaman leyes «naturales», o ley «común». Según su teoría, las leyes naturales sólo requieren que los individuos no perjudiquen a otros, no dañen la propiedad de los demás, y no utilicen «fraude o malicia» en los contratos. Dicen que todas las personas existen en dos formas: – su cuerpo físico y su persona jurídica. Esta última está representada por su certificado de nacimiento, algunos freeman reclaman que este último se limita exclusivamente a la partida de nacimiento. Según esta teoría, se crea un «hombre de paja» cuando se emite un certificado de nacimiento, y que esta es la entidad que está sujeta al derecho escrito. El cuerpo físico se conoce por un nombre ligeramente diferente, por ejemplo «Juan de la familia Smith», en lugar de «John Smith».